La alimentación de los cerdos es crucial para su crecimiento, bienestar y producción, ya sea de carne o de lechones. Es importante proporcionarles una dieta balanceada que cubra sus necesidades nutricionales en términos de energía, proteínas, grasas, minerales y vitaminas. El alimento comercial para cerdos suele estar formulado específicamente según su etapa de vida y objetivo productivo: Pre-iniciador (lechones): Para lechones en sus primeras semanas de vida, este alimento es rico en proteínas y energía para promover el crecimiento rápido. Se ofrece en forma de harina o gránulos pequeños. Iniciador (destete): Para cerdos destetados, también tiene un contenido alto de proteínas y otros nutrientes esenciales para continuar el rápido crecimiento. Crecimiento o engorde (cerdos de engorde): Formulado para cerdos jóvenes que se crían para carne, con niveles moderados de proteínas y energía para maximizar la ganancia de peso. Finalizador (cerdos a punto de sacrificio): Tiene una menor cantidad de proteínas y más energía, enfocándose en el engorde final antes del sacrificio.